Esta noche quisiera
arañar tu alma,
morder(te),
donde tu espalda
pierde su nombre,
besar tu deseo,
lamer cada rincón de ti,
hasta borrar(te)
con mi lengua,
todo lo que no sea mi nombre,
cuando lo gritas
entre gemidos
Le miro a los ojos y entonces una sensación desconocida recorre mi espalda y se que estoy a su merced, por el simple capricho del deseo. Su...
No hay comentarios:
Publicar un comentario