No cuento los minutos,
Ni espero que los relojes se paren,
Y aunque los recuerdos permanezcan imborrables bajo mi piel,
Hoy mis labios saben a sal, cuando necesito respirar(te)
Hubiéramos podido seguir siendo un sueño...
Pero despertamos.
Le miro a los ojos y entonces una sensación desconocida recorre mi espalda y se que estoy a su merced, por el simple capricho del deseo. Su...
No hay comentarios:
Publicar un comentario