No necesito los ojos
para ver tu alma,
así como no necesito
que acaricies mi piel para sentirte,
ni siquiera necesito
que me cuentes tus sueños al oido, porque un día fuimos infinitos
y soñamos juntos
sin dormir en la misma cama.
Podría deciros que no dormí sintiéndome culpable, pero mentiría, me dormi al instante y desperté rara, lánguida y más viva que nunca. No q...
Emocionante, sin mas
ResponderEliminarMerci
ResponderEliminar