lunes, 27 de enero de 2025

Improvisando2

 Se sentó al borde, se inclino un poco y subiendo mi jersey saco ambos pechos y los sobó, no acariciaba, estrujaba, pellizcaba, tiraba...y yo nunca había estado tan cachonda.

Entonces me apartó y gemi una queja, ganandome otro azote en la cara, me hizo poner en pie, me llevó hacia la pared, pegó mi cara a las baldosas, agarró mis caderas y tiró, me bajo el pantalón junto con las bragas, justo por debajo del culo, se pego a mi, notaba su aliento en mi nuca, su erección en mi culo y mordió mi cuello...

- joder golfa, estás chorreando -dijo metiendo sus dedos en mi seco hambriento

Casi me corro con ese mordisco, esa penetración...

-espera, no puedes correrte aún 

Añadió un segundo dedo, un tercero...mordía, entraba y salía...me temblaban las piernas, apenas podía contenerlo...

Saco sus dedos, tiro de mis caderas, su polla se deslizó entre los labios, presión...el glande...tiró, movió las caderas y susurro

-ahora mi zorra...córrete en mi polla 

Y antes de acabar de pronunciar la a, mi cuerpo convulsiono con el puto mejor orgasmo de mi vida. Si no me agarrara con sus manos en las caderas y delante la pared, habría caído de bruces y no paró siguió penetrándome sin piedad, podía oír el chapoteo...

Entonces oímos ruido fuera, le miré y el entreabrio la puerta y para mi sorpresa la abrió del todo.

Afuera un hombre vestido de uniforme, era claramente un trabajador de allí. Podía notarse su ereccion bajo el tirante pantalón.

Mientras yo me hacia a la idea siguió follandome ante la oscura mirada del hombre que podía ver mi culo, su polla y mis tetas colgando...balanceándose con cada embestida, cada vez más brutal...

Otra vez estaba al límite, sus manos estrujaban mis tetas, su polla entraba y salía y el mirón se tocaba sobre el pantalón, mirando mis doloridas tetas.

-tocaselas -le dijo al tío

Y este poniendo un letrero de fuera de servicio atranco la puerta, se acerco y agarro mis tetas 

Era más suave, no me gustaba ese hombre y eso me ponía aún más, el jadeo, empujo, jadeo y lleno mi coño de semen.

Cuando salió note escurrir por mis muslos, ambos miraron, el hombre se tocaba con furia y el me acerco

-vamos mi perra, ayúdale. 

Sabía lo que esperaba, le desabroché el pantalón, le saqué la polla y empecé a mearsela, él no dejaba de amasar mis tetas, mi mano subía y bajaba, él azotaba mi culo. El hombre le miró a él, asintió y los dedos de ese desconocido llenaron mi coño, tres dedos rudos entraban y salían, el hombre jadeaba...y volví a correrme, momento en el que el lleno mi mano dejándola viscosa.

Apenas me tenía en pie y ese hombre me sentó en el lavabo, me abrió, se arrodillo y lamió su semen de mis manos, un muslo que había salpicado y finalmente deboró mi coño. Me hacía daño, lamia, mordisqueaba... volví a correrme en su boca...

Para mi sorpresa mientras el hombre se limpiaba, el me bajo, me puso de rodillas y detrás de mí en cuclillas y sin previo aviso note su polla en mi culo, presionó y empujo hasta meter el glande, yo apenas podía respirar y empujo hasta la mitad

-tranquila zorra, esta todo chorreando entraré 

Y ante la atónita mirada de ese hombre que volvía mandársela y de un solo envite me penetró, ambos rugimos pero ni yo me aparte ni el dejo de follar mi culo hasta corrernos de nuevo.

El hombre se fue y nosotros nos limpiamos como pudimos, se recoloco la ropa y salimos de allí. Tenía que volver

No hubo palabras de amor ni para siempres, un solo beso, una sonrisa y la certeza de que lo que teníamos nosotros fuera lo que fuera era irrepetible y único entre nosotros, salvajemente unidos.



Improvisando

 Pintaba a domingo de mañanita de paseo y tarde de peli, mantita y sofá...cuando sonó una notificación 

*hola, sabes? Esta tarde estaremos cerquita, ha salido casi de repente y no te he dicho antes por no comprometerte, ya que apenas voy a estar unas horas.

Unos cuantos WhatsApp después nos despedimos entre lamentos.

Mientras comía no dejaba de darle vueltas a la situación y tome una arriesgada decisión que me llevó dos horas después a buscarle entre la gente de aquel lugar. 

Le vi enseguida, serio, hablando entre mucha gente. Los nervios, el miedo y mil sensaciones se agolpaban dentro de mi, cuando se giró y me vio.

No aparte la mirada, pendiente a su primera reacción y entonces sonrío.

Salir corriendo tras verle como también había barajado, no era ya una opción y con la adrenalina que generó en mi esa sonrisa, me di la vuelta y con paso lento pero decidido fui hacia los baños del recinto. Abrí, me giré y vi que venía hacia mi. Me decidí por el de caballeros, entré y me metí en un cubículo, dejando la puerta entreabierta.

- no esperaba... empezó a decir

No había tiempo que perder, mientras hablaba desabroche su cinturón, metí mi mano y acaricié por primera su polla mientras nos deborabamos.

- joder, como me pones, zorra.

No necesitaba más aliento y me arrodillé a sus pies, liberé su polla ya dura y sin dejar de mirarle lamí toda su extensión, succioné la punta y volví a lamerla con avidez, mientras se la meneaba.

El metió la mano por el escote de mi jersey y apretó mi teta por encima de suje, luego metió la mano, la sacó y pellizcó mi pezón. 

- deberías parar un poco -dijo su boca

Pero su mano no soltaba su presa, y con la otra me agarro del pelo atrayendome.

Le miré para dejarle claro que no iba a parar, moría por saborearearle y lejos de parar acelere, el gimió, soltó mi pecho, agarro mi cabeza con ambas manos, movió las caderas y pegando mi cara a su pubis, sin apenas poder respirar, se corrió en mi garganta.

Apenas podía tratar y su semen escurria por las comisuras, goteaba a mis pechos y yo seguía lamiendo, hasta la última gota.

- no pares, zorra, ahora sigue

Entonces me abofeteó por no haber parado y yo seguí lamiendo, mientras se bajaba el pantalón a los tobillos y se sentaba en el W.C. separé sus rodillas y lamí su ano, sus pelotas...le miré y dejé caer saliva, para seguir lamiendo, notando feliz como volvía a ponerse duro...



domingo, 5 de enero de 2025

Morbo 2

 Miré como se colocaba el pantalón, dejando la camisa por fuera antes de decir:

-deberías quitarte las braguitas, están empapadas

Y sin esperar, él mismo agarró el elástico y tiro de ellas, yo me quité el sujetador:

-me prestas ese jersey

Se lo quita y me lo da, me lo puse y me a medio muslo, tapando mi desnudez.

Abro la puerta, y salgo al balcón, donde enciendo un cigarro. Dos minutos después le oigo detrás, y pegándose a mi espalda, me pasa su vaso, le doy un trago y se lo devuelvo. Ya ha oscurecido y nos quedamos en silencio unos minutos, sus manos, aferrardose mis caderas y un suave tironcito pego mi culo a su prometedora dureza creciente, mientras me susurra:

-necesito follarte -esa demanda y su voz ronca me pusieron aun más caliente-

-hazlo

No se hace de rogar y con una sonrisa en los labios, oí como se desabrochaba el pantalón y note su dura polla rozar mi culo, me puse de puntillas, me aferré a la barandilla y su polla resbaló llenandome por primera vez lentamente para volver a salir casi por completo y ahí terminó la lentitud y suavidad. Sus dedos se clavaron en mis caderas, sus caderas arremetida una y otra vez sin pausa, su boca se alimentaba en mi cuello, yo no podía frenar los jadeos, aún estando en el balcón y a vista de todos. Mi pubis se rozaba y golpeaba contra el murete. No paró hasta que todo mi cuerpo tembló, y sin que me recuperará, pasó su brazo por mi cuerpo,me dio la vuelta, y sin salir de mi, me dobló hacia la mesa y siguió cada vez más profundo y duro, mientras todo mi cuerpo vibraba.

Su mano en mi nuca, la otra arañó mis costillas, hasta llegar a mis caderas y entonces sonó el primer azote, mi culo ardió, entro con más fuerza, salió y otro azote...juro que llegué a confundir el placer de mi coño, con el dolor de cada azote y a desear ambos con la misma intensidad.

La mano de mi nuca recorrió mi columna, y un dedo presionó mi ano y me removí:

-relajate zorita Mía. 

Su voz no era dulce, ni suave, al igual que cada arremetida, entre las que me penetró con un dedo...dos...

Ni siquiera se cuantas veces me corrí, antes de que sacará su dedo, y su polla dejándome huérfana...lloriquee.

-quieres más verdad

No era pregunta, volvió a follar mi coño una vez, salió y la llevó a mi puerta trasera, me tensé, y se hizo hueco mientras yo me aferraba a la mesa, oyendo sus jadeos.

- vamos nena, ven conmigo

Su voz era aún más ronca cuando salió, frotó mi clitoris y entró de nuevo, se quedó quieto y noté el calor húmedo de su corrida, mientras volvía a correrme como no lo había hecho nunca...


 



viernes, 3 de enero de 2025

Morbo

 Por fin ha llegado el día. Mis nervios aumentan a cada trago de cafe, que calienta mi garganta, mientras te espero.

Puntual entras por la puerta, te reconozco al instante y sonríes acercándote.

Es todo tan raro y excitante, hablar como hemos hecho mil veces, teniéndote enfrente.

El tiempo pasa volando y tres cafés después me dices un simple:

- vamos? (Que abarca un mundo)

Simplemente asiento y te sigo. Ambos sabemos donde vamos, esta decidido desde que organizamos nuestra primera cita.

Subimos a la habitación, sin tocarnos, sin besarnos...

Sonrió al ver el sillón frente a cama, dispuesto como imaginaba. 

Te sientas en el sillón y se que mi lugar está a los pies de la cama, cuando de tus labios sale un pausado:

-desnudate

Y sin dejar de mirarte derrabrocho mi amplio pantalón y cae a mis pies, me deshago de el, a continuación saco el jersey por mi cabeza y me quedo en ropa interior ante tu escrutinio.

La vergüenza y las ganas de cubrirme, acentúan la excitación de ese momento, que a ambos siempre se nos antojo de lo más morboso...

Me siento en el borde de la cama, abro las piernas y dejo que veas, la humedad que empapa mis bragas; mientras estudio como el deseo oscurece tu mirada.

-quiero verte más-pides-

Corro la braguita a un lado, echo el culo hacia atrás y subo los talones

Quieres parecer impasible, pero te relames y ese gesto te delata. 

Con tres almohadones detrás estoy solo semi tumbada, y puedo acariciar mis muslos, subir por la cara interna y llegar donde el deseo arde. Sin dejar de mirarte, paso dos dedos por mi rajita, una y otra vez, lentamente, disfrutando del roce de las yemas de mis dedos...

-metelos-ordenas con voz queda-

Y como no, obedezco con gusto, y gimo cuando resbalan dentro de mi...

Tú sueltas el aire, que ni sabías que retenias, mientras veo como te desabrochas el pantalón, y tiras de estos, lo justo, para que tu polla salte como un resorte. 

Jadeo cuando tres de mis dedos, entran y salen de mi coño ardiendo, sin dejar de mirar, como tu mano talla tu polla, sube y baja, al ritmo de mis dedos.

Es hipnótico mirarte, la habitación se llena de gruñidos y jadeos, tu polla brilla húmeda y entonces te levantas, te pones a un lado de la cama de pie

-saca tus tetas de sujetador

Con la mano libre, hago lo que me pides, meto los dedos, arqueo la espalda suplicando, y entonces das un alarido, y un primer chorro de semen, cae en uno de mis pezones, no puedo más, y gimoteo que me corro, mientras tu corrida cubre mis tetas, mi tripa, y alguna gotita sobre mi coño.

Tiras de mi brazo, tocándome por primera vez, llevas mi mano a tus labios, y la besas ostentosamente

-Un placer...fin de las presentaciones -dices lamiendo mis dedos-








Lo aprendí